Gracias a la ley norteamericana de desclasificación de documentos secretos se ha conocido una carta que envió Kennedy al director de la CIA pocos días antes de morir. Por otros documentos desclasificados se sabe que la decada de los cincuenta y de los sesenta están plagadas de sucesos de encuentros con naves de origen desconocido, tanto por el lado americano como por el soviético. Por esta situación le expresaba al director de la CIA su temor porque la confusión de un 'ovni' con un avión espía tanto por las autoridades americanas como soviéticas desembocara en un ataque contra su rival, lo que se traduciría en aquella época en un guerra nuclear en apenas horas.
Aparte de sus temores le solicitaba un informe donde debía de indicarle los acontecimientos 'serios' con objetos no identificados sucedidos en los últimos años y un listado con los aviones espía y prototipos que disponía el ejército norteamericano que pudieran dar lugar a confusiones por parte del enemigo.
No es raro que un presidente americano tenga que pedir a su agencia de inteligencia información que desconoce y que nadie tiene interés en suministrarle. Las relaciones entre la CIA y los presidentes de Estados Unidos tienen bastantes sombras a lo largo de la historia.
Hoy se duda de si ante su temor JFK iba a entregar ese informe a los soviéticos para que supieran interpretar que aparatejos violaban su espacio aereo. Nunca lo sabremos porque nunca llegó a tenerlo, lo impidió su asesino, Lee Harvey Oswald, porque su asesino fue él, ¿o no?
Camachín, esto huele a conspiración.
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