En la mayoría de ocasiones me parece demasiado descarado e insolente, aún así si puedo intento ver el programa. La semana pasada estuvo en Israel y entre otras personas entrevisto a un judío ortodoxo de origen español, lo pillé ya empezado pero imagino que el señor tal y como hablaba era andaluz.
El señor, que era muy amable y simpático, entendía que a su parecer las mujeres debían de ir muy recatadas y con pañuelo en la cabeza,sin tapar el rostro, además le explicaba a Jordi que a su mujer la conoció tras concertarse varias entrevistas con ella, de manera metódica y estipulada, nada natural. '¿Entonces no te casaste enamorado de tu mujer?' le preguntó Evolé al ortodoxo, 'no, enamorado en cuanto a ceguera, pasión e ilusión con la otra persona no, no es necesario'.
Tal y como lo describió el judió evidentemente si había estado enamorado, pero no de su mujer, de cualquier otra con la que seguramente no pudo casarse debido a su religión.
El realizó su elección, viva la libertad, incluso para esto.
Andrés Bonafont.
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