Cada vez estoy más desencantado con el periodismo deportivo, las novedosas tertulias deportivas de hace dos o tres años ahora son una rutina cercanas al entérate si oyes algo y a la creación de problemas y polémicas donde en ocasiones no hay nada. Y en cuanto a mis amados 'Marca' y 'As' cada vez leo menos páginas, casi por defecto las cinco o seis primeras páginas las salto del tirón, en ocasiones parecen una carretilla con paja. Hablando de polémicas forzadas un hombre polémico por naturaleza es Javier Clemente, aunque más que polémico es 'contradictivo', adicto a la contradicción, si la mayoría lo ve blanco él lo verá oscurísimo y al revés.
No soy muy fan de él, más todo lo contrario, no me gusta el fútbol que practican sus equipos y las formas que gasta en ocasiones me disgustan. Eso no cambia que me encantaría que su selección hubiera sido campeona del Mundo y de Europa. Hubiero sido mayor la enorme alegría que me habría supuesto a los catorce o quince años que la selección de Zubi, Hierro, Salinas ,etc, hubiese logrado esos campeonatos a la que sentí con las victorias de los últimos años, en aquella época la juventud me hacía vivir los torneos con mayor intensidad. Los desencantos tras las derrotas fueron gigantes.
Confirmado pues que por un lado no lo trago mucho y que por otro ojalá Clemente tuviera dos o tres títulos internacionales para su alegría y la mía, cabe decir que cansa ya que cada vez que el rubio vasco diga dos palabras los periodistas lo quieran convertir en polémica. Hoy ya salen noticias, "Clemente aviva la polémica", "polémicas declaraciones de Clemente". La selección perdió el Sábado en Wembley con Inglaterra y el Martes empató en Costa Rica. Tras estos dos mediocres resultados los avispados periodistas pensaron,"¿como sacamos chicha a esto?, haber si tirando de una crisis en la selección rellenamos cinco días los periódicos y veinte horas de tertulia, leches que idea acabo de tener, rápido ¡preguntarle a Javier Clemente por la selección!"
Dicho y hecho, tras sus "polémicas" declaraciones ya tienen hojas y horas de radio y tele para rellenar. Ahí van las incendiarias declaraciones:
- Señor Clemente, ¿su selección podría haber ganado a la actual?.
- Claro que sí, la mía era una gran selección.
- Señor Clemente, ¿qué selección le gusta más, la suya o la actual?
- ¿A mi?, la mía, me gustaba más nuestro estilo de juego.
Va a arder Troya, ¡tertulianos a tertuliar!
Aquí vemos a Julio Salinas batiendo a Pagliuca.
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